La extracción de las muelas del juicio es un proceso muy frecuente y sencillo que consiste en quitar los terceros molares. A menudo, este tratamiento causa inquietud en quienes tienen que pasar por él, pero en este artículo vamos a despejar vuestras dudas y temores y os vamos a explicar cómo extraer las muelas del juicio sin dolor.
¿Qué son las muelas del juicio?
Las muelas del juicio son los terceros molares definitivos y ocupan la posición 8 en la secuencia de erupción de los dientes definitivos del adulto.
Erupcionan en la zona más posterior y limitada del maxilar y la mandíbula, de ahí que sólo lleguen a su posición final el 20% de ellos. La zona anatómica que alberga estos molares suele presentar gran dificultad para una correcta la higiene.
La edad de salida de estas muelas oscila entre los 16 y 21 años, según el sexo y desarrollo del paciente. Por este motivo, también se denominan «cordales», pues erupcionan a la edad «en la que se adquiere el juicio o la cordura». Con frecuencia erupcionan antes en las chicas, pues van más adelantadas en el desarrollo.
Su función masticatoria es escasa, ya que la trituración y desgaste eficaz del alimento se realiza en la zona premolar-molar.
¿Cuántas muelas del juicio tenemos?
Existe 1 cordal en cada cuadrante de la boca, dos superiores y dos inferiores: por tanto un adulto estándar tendrá 4 muelas del juicio.
Con motivo de la evolución de la especie humana (disminución del tamaño de los huesos maxilar y mandíbula) y la ausencia de función de estos molares y de la presencia actual de una dieta más blanda y elaborada es cada vez más frecuente observar en la consulta la ausencia de uno o varios de estos molares en los pacientes. La ausencia de muelas del juicio se denomina «agenesia de cordales».
En raras ocasiones, se diagnostica la ausencia de los cuatro cordales, lo cual supone un claro signo de evolución del individuo. La agenesia de cordales tiene una incidencia de entre el 5 y 30% de los pacientes.
En otras ocasiones y con una frecuencia mucho menor, se observa como hallazgo radiográfico la presencia de un molar extra tras esta muela, llamado diente supernumerario o distomolar, con una mayor incidencia en el maxilar que en la mandíbula.
¿Por qué es tan frecuente que se tengan que extraer las muelas del juicio?
Como consecuencia del limitado espacio que poseen estos molares para erupcionar y las dificultades para poder mantener una higiene adecuada entre el segundo molar y el tercer molar (o muela del juicio), los cordales en su intento de erupción e incluso una vez en su posición en la boca, provocan lesiones tanto en los dientes adyacentes como en todos los tejidos circundantes.
Formas y posiciones de las muelas del juicio
Anatómicamente, los cordales son los molares más variables en cuanto a la forma y disposición de sus raíces. Os presentamos algunas variaciones anatómicas en el siguiente esquema:
Además, es una muela que no llega siempre a la boca con la misma dirección. Winter estableció las posiciones de estos molares, que resumimos en este esquema:
La disposición más habitual es la mesioangulada en terceros molares inferiores y la vertical en los superiores. La presentación invertida es muy poco frecuente, pero cuando se presenta, la dificultad de la extracción se complica algo más.
¿Qué problemas causan los cordales con más frecuencia?
La patología más frecuente de estos molares en su intento de erupción es la «pericoronaritis», que es la inflamación e infección del saco pericoronario (tejido blando que rodea a la corona) durante la erupción.
Los signos de pericoronaritis son la inflamación y el enrojecimiento de la encía que cubre esta muela. En algunas ocasiones se acompaña de supuración. Otros síntomas que puede presentar el paciente son: fiebre, dificultad al tragar (disfagia), dolores localizados o irradiados al oido, al primer molar o incluso a la arcada contraria.
El tratamiento de la pericoronaritis va enfocado en primer lugar, a enfriar el proceso con la pauta de medicación antibiótica durante 7 días. Y una vez, curada la infección activa, recomendamos la extracción.
Otros problemas que puede causar la muela del juicio al intentar llegar a su posición es infectar con caries al diente adyacente, como consecuencia de la presión posterior del segundo molar y la dificultad de higiene de la zona e incluso periodontitis del diente adyacente.
En menos ocasiones, vemos los llamados procesos «tróficos», como zonas de alopecia en el cuero cabelludo (placas de pelada), o el desarrollo de quistes y tumoraciones causados por el tercer molar.
Motivos para extraer las muelas del juicio
- Dolor más de 2 veces al año en los intentos de erupción de la muela del juicio o caries.
- Ausencia de espacio en las arcadas para su correcta erupción: molares retenidos.
- Infecciones repetidas del saco pericoronario (pericoronaritis).
- Daño de dientes o tejidos adyacentes: caries en zona posterior del segundo molar, periodontitis por imactación de alimentos, reabsorción de la raíces (rizolisis) de los segundos molares.
- Lesiones en los tejidos blandos circundantes: ulceraciones o mordisqueo de la mucosa del interior del carrillo.
- Presencia y desarrollo de quistes inflamatorios u odontogénicos.
- Detección de imagen tumoral de los huesos maxilar y/o mandibular (el más habituales el ameloblastoma)
- Motivos ortodóncicos.
- Cirugía ortognática.
- Consideraciones protésicas o rehabilitadoras.
¿Cómo extraer las muelas del juicio sin dolor?
En primer lugar hay que diagnosticar su posición, patología y tratamiento, y para ello, la prueba radiográfica habitual para realizar un correcto diagnóstico de su posición y patología asociada, que nos ayuda a valorar y planificar el tratamiento es la ortopantomografía o radiografía panorámica.
Con esta sencilla prueba, podemos establecer su presencia o no en el maxilar y mandíbula, su posición y la relación que presenta esta muela con las estructuras anatómicas de alrededor.
En ocasiones, necesitamos un estudio más completo en 3D o imagen tomográfica, que realizamos en nuestra clínica, para determinar la relación del tercer molar con el nervio dentaría inferior o con un quiste.
¿Cómo es la intervención?
La intervención de los cordales se realiza en nuestra consulta bajo anestesia local de la zona y es sencilla y totalmente indolora. La duración del proceso es de aproximadamente 30 minutos.
Existe la opción de quitar todas las muelas en una única sesión, pero si tenemos que realizar la extracción de las 4 muelas del juicio, nuestra recomendación es realizarlas de 2 en 2. Es decir, quitar en una sesión las de un lado y a las dos semanas las del otro lado.
Esta forma de actuar, te permitirá llevar una dieta saludable mientras te recuperas de la extracción. Además, las molestias serán la mitad de intensas que si quitamos las 4 en la misma cita.
En González y Casado, somos especialistas en Cirugía Bucal y tenemos amplia experiencia realizando este tratamiento. Nuestra cirujana, la Dra. González Sánchez cuenta con más de 15 años de práctica especializada y ha estado en Hospitales madrileños de prestigio como el Clínico San Carlos o la Zarzuela. Ponerse en sus manos, es una garantía de éxito.
Si deseas que valoremos tu caso y realicemos un diagnóstico del estado de tus cordales, acude a nuestra consulta: estamos a tu disposición para resolver tus dudas y proponerte el mejor tratamiento. Recuerda, que la primera consulta es gratuita e incluye un estudio radiológico completo y asesoramiento clínico sin compromiso.
Ten juicio: visítanos cada 6 meses para poder revisarte y no esperes a que te moleste un tercer molar. En González y Casado, tu clínica de especialidades en Madrid centro, trabajamos cada día para proporcionarte el bienestar y Salud de tu boca. Con nosotros tu boca está en las mejores manos.
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